Hijo de bailarina y nieto de cantaor, llevaba escrito en los genes que llegaría a ser alguien en el mundo del flamenco. Fue solista del Ballet Nacional durante tres años y trabajó en diversas compañías hasta que formó la suya. Bailó por los escenarios de medio mundo con artistas de la talla de Nureyev, Maya Plisetskaya o Julio Bocca, con quien compartió en 1990 el Premio al Mejor Bailarín Internacional Ciudad de México. Dos años antes había recibido en Italia el Premio Navisela al Mejor Bailarín.

En 1992, Antonio Canales creó su propia compañía y debutó en Bilbao con las coreografías 'A ti, Carmen Amaya' y 'Siempre Flamenco'. Su mayor triunfo le llegó con 'Torero', estrenado en Canadá en 1993, con el que obtuvo el Premio Nacional de Danza de 1995 y llegó a barajarse para director del Ballet Nacional de España. También ha recibido la Medalla de Andalucía y el Premio Max al Mejor Espectáculo de Danza por 'Gitano', la obra que lanzó al estrellato a Sara Baras.

Creador incansable, ha llevado a escena numerosas obras: 'Bengues' (1998), 'Guernica' (1998), 'Raiz', 'Fuerza Latina', 'La Cenicienta'… Participó con Ketama en la grabación del disco 'De Akí A Ketama'. También ha pasado por el cine: tuvo un papel destacado en Montoyas y Tarantos, candidata a los Oscar en 1990, protagonizó 'Vengo' en 1999 y recientemente, ha concluido el rodaje de 'Duende'.